Causas de la Lumbalgia en adultos jóvenes
Generalmente, las personas más jóvenes (30 a 60 años) son más propensas a experimentar dolores de espalda por una distensión muscular lumbar o surgidos del espacio intervertebral mismo como una hernia discal lumbar o la discartrosis.
Distensión muscular:
Ocurre al levantar algo pesado, torcerse o realizar un movimiento brusco, puede producir un estiramiento de los músculos o ligamentos y provocar desgarros.
Hernia discal lumbar:
Suele ser agudo, repentino y violento en intensidad. Incluye síntomas propios de la ruptura discal y otros provocados por la presión de la hernia sobre la médula o los nervios.
Discartrosis
Puede afectar a pacientes de tan solo 20 años de edad. Los discos intervertebrales empiezan a deteriorarse causando inflamación y una leve inestabilidad de la parte inferior de la espalda, provocando dolores, espasmos. Es una afección común y con frecuencia se trata con éxito.
Lumbalgia en los adultos mayores
Las personas mayores de 60 años de edad son más propensas a sufrir dolores relacionados con la degeneración de las articulaciones de la columna vertebral. Dos de las causas más comunes de la lumbalgia en los adultos mayores son la artrosis y la estenosis vertebral.
Puede incluir cualquier combinación de los siguientes síntomas:
Dolores que interrumpen el sueño
Un dolor que es más pronunciado a primera hora de la mañana y otra vez al final del día
Un área localizada de la columna que es dolorosa con la palpación
Un dolor sordo, continuo o intermitente, en la parte inferior de la espalda que se agrava después de hacer mucha actividad física
Entumecimiento o una pérdida de flexibilidad en la espalda (por ejemplo, una incapacidad para doblarse por la cintura con comodidad)
¿Cómo tratar y aliviar la Lumbalgia?
El tratamiento para la lumbalgia depende de los antecedentes del paciente y de la gravedad del dolor. La gran mayoría de los casos de la lumbalgia se curan dentro de seis semanas sin cirugía y los ejercicios para la lumbalgia son, casi siempre, parte del plan de tratamiento.
Descanso:
Dejar de realizar actividades durante unos días permite que los tejidos lesionados, y hasta las raíces nerviosas, empiecen a curarse, lo que a su vez puede servir para aliviar la lumbalgia.
Compresas de calor y hielo:
Facilitan el alivio de la mayoría de los casos de lumbalgia al reducir la inflamación. Muchas veces los pacientes utilizan el hielo, pero algunos prefieren el calor. Se puede alternar entre los dos.
Medicamentos:
Cada medicamento tiene múltiples riesgos únicos, posibles efectos secundarios e interacciones farmacológicas que deben ser recomendados por un especialista.
Ejercicios para la lumbalgia:
El ejercicio es un elemento clave en casi todo plan de tratamiento de la lumbalgia. El fisioterapeuta te brindara un programa controlado y progresivo, con el objetivo de lograr tener una columna más fuerte y flexible.